domingo, 15 de abril de 2007

um vazio

Antônio vino, trajo mucha alegría y cariño (y huevitos de pascua). Fuimos juntos a todas partes, a ver a mis abuelos, a la parcela de mi mamá.

Ahora Tunico está viajando, de vuelta a Italia, y siento que una parte de mí se fue también, me hace falta, siento un vacío en mi pecho y me duele la guatita.

Ni siquiera tengo ganas de comer chocolate...